Esta tarde desde la hora 15 de nuestro relojes, la selección uruguaya de fútbol que dirige el Maestro Oscar Tabárez, enfrentará a su similar de Hungria, en el marco de un partido amistoso que sirve también para la inauguración del Arena Ferenc Puskas en Budapest.
El DT celeste no adelantó el once inicial, que se sabrá seguramente en el correr de esta mañana.
Por otro lado y con respecto al complicado choque ante Argentina del lunes, se sabe que el estadio Bloomfield de Tel Aviv estará con el máximo de su capacidad para albergar una nueva edición del clásico del Rio de la Plata. Son alrededor de 29.000 entradas que se pusieron a la venta la semana pasada y, en menos de dos horas, se agotaron.
Uno de los temas que ha causado mucha preocupación sobre este partido es a todo lo que se refiere con la seguridad. "Tel Aviv no es menos seguro que Buenos Aires o Barcelona y estamos trabajando con los organismos profesionales más importantes de Israel para organizar este partido amistoso con los más altos estándares", sentenció Daniel Benaim, patrocinador del encuentro y director general de la empresa organizadora, Comtec Group.
Benaim dijo que la gran razón del partido es "utilizar este tipo de actividades para promover la paz común". A su vez, añadió que en el estadio juntarán "a niños musulmanes, cristianos y judíos que juegan al fútbol juntos y sueñan con traer la paz con el deporte".
Tan grande ha sido la expectativa que despertó este partido en el público israelita que cuando pusieron a la venta las entradas, la semana pasada, las agotaron en menos de dos horas.